¿Estás listo para poner a prueba tu percepción? La imagen de abajo tiene algunos detalles sutiles que la mayoría de las personas pasan por alto, pero aquellos con habilidades de observación agudas pueden detectarlos al instante.

Y, si eres capaz de detectar lo que no funciona, ¡estás entre el 2% de la población cuyo cerebro no se dejará engañar por tus ojos!

Este desafío no se trata solo de la vista; se basa en cómo nuestro cerebro procesa la información visual, a menudo llenando los espacios vacíos sin que nos demos cuenta.

No es que el 98% de las personas carezcan de habilidades de observación, es que nuestros cerebros son excepcionalmente hábiles para llenar los espacios vacíos en función del contexto y la familiaridad. Por ejemplo, si estamos acostumbrados a ver un reloj con manecillas, nuestro cerebro podría “completar” automáticamente la que falta sin que nos demos cuenta conscientemente de su ausencia.

Esta imagen en particular aprovecha la tendencia de nuestro cerebro a crear atajos mentales, que nos ayudan a procesar grandes cantidades de información rápidamente. Sin embargo, estos atajos a veces pueden hacer que pasemos por alto detalles importantes.

En esta escena de playa aparentemente tranquila, una pareja disfruta de una cita, tomados de la mano, saboreando la vista del océano.

Cuando miras esta foto, tu cerebro puede recordar el olor del aire salado del océano, o tal vez incluso cómo se siente el sol en tu rostro.

Pero, antes de que te dejes llevar por los recuerdos de tus últimas vacaciones, hay dos errores (tal vez tres) en esta imagen que debes identificar.

Concéntrate en la imagen y antes de desplazarte hacia abajo para ver las respuestas, intenta encontrar lo que falla en esta foto de playa aparentemente idílica.

Y ahora, veamos qué tan observador eres realmente.

En el aire

El primer error es un poco astronómico. La luna se presenta dos veces y en dos ciclos diferentes: una luna llena a la derecha y una luna creciente a la izquierda.

Eso nunca sucederá, al menos no en la Tierra.

Hombre guapo

El segundo error es que el hombre tiene un brazo adicional que se extiende desde el área de su estómago. Un brazo rodea a su novia, el otro lo sostiene en la arena y la tercera extremidad sostiene un teléfono.

Este tipo de desafíos visuales nos recuerdan las fascinantes formas en que nuestro cerebro interpreta el mundo que nos rodea. No solo ponen a prueba nuestra atención a los detalles, sino que también nos muestran las impresionantes y a veces engañosas formas en que funciona nuestra mente.

¡Cuéntanos si tu vista de águila detectó las anomalías y luego comparte esto con tus amigos y ponlos a prueba!